
El siempre polÃticamente correcto Toto Wolff ha llegado a su lÃmite. Cansado de que a los de Red Bull les permitan arreglar cualquier problema que se les presente, vio como le saltaba el termostato cuando penalizaban al Mercedes de Hamilton por un problema insignificante con el alerón trasero. Luego, en la carrera de Sao Paulo, explotó cuando no castigaron a Verstappen por su maniobra en la vuelta 59. Su gesto, y la lectura de sus labios lo dijeron todo cuando Lewis superó a Max. Instantes después le soltaba un "¡a por ellos!" a Bottas, y al término del fin de semana señaló que "la diplomacia se ha terminado". Las tres carreras que faltan serán mucho más que tres finales. Quien se mueva no saldrá en la foto. 14 puntos separan a los dos pilotos, y 11 a ambos equipos. TodavÃa queda… Seguir llegint